Tú, la noche estrellada y la calma,
la paz del descanso ajeno,
la nostalgia en desenfreno
y tú soñando, mujer de mi alma
Tú, lo acogedor de tu seno,
las sombras que acarician tu espalda,
te dan abrazos que me hacen falta
y tú sigues descansando a pleno
Y yo aquí nada más, añorándote
cómo quien añora el mañana
pudiendo estar soñándote
Y yo esperando que inicie la semana
para seguir conociéndote
Tú, mi noche estrellada
No hay comentarios:
Publicar un comentario